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Porque a pesar de todas estas muertes sucesivas, de la idiosincrasia del agua y todo objeto celeste. Me cuestiono este cúmulo de nubes en el pecho. Este despertar en cada gesto que me empareja con la muerte. Pues debido a ello puedo descansar esta turba de colores en la hierba. Porque a pesar de ser cierto, de creer en la supremacía del oro bendito de tus alucinaciones, a pesar de todo esto, puedo hundirme lentamente en el sueño de los metales más preciados que gravitan en torno a la idea fabulosa de tu existencia eléctrica. A pesar de la muerte misma que se instala en este reino donde los pájaros se estrellan a tus pies, confundidos, como yo en este instante donde se quiebra el universo. He pasado días pensando que hueso le corresponde al esqueleto de esta galaxia. Y no he hecho más que sentir mi corazón de terciopelo quemado por lo verdadero. Doy vuelta a mis bolsillos como si de mi propia piel se tratase, para encontrar las flores que recogí durante estos tres últimos años. Le doy vuelta a mi alma que regresó esa noche como un perro que vuelve después de perder el olfato. Y la tiendo al sol, es una sábana blanquísima brillando bajo todas las constelaciones con nuestro torso tatuado, al igual que el manto de Turín, que a pesar de ser una mentira es la mentira que más amo, de mirarla con los ojos del pequeño que era y que miraba el fuego y se perdía en ese trance inacabable, de caballos cabalgando fuera de los reinos de la muerte, que anhelaba a pesar de ser una aurora boreal en los confines de la conciencia a veces mía a veces la de un colibrí con la fortaleza de un toro de Lidia. Que viste de sangre en su cuerpo de campos verdes. No podría darle nombre a este río del que todos hablan, a pesar de su transparencia, a pesar del lodazal que odian y donde florecen los nenúfares que nadie ve. El sol cae junto a la mentira que enarbolo, que blande tu aliento. Al unísono de una estructura mayor que desconozco pero que hace vibrar mi futuro, y me concede un golpe contra lo que temo y es a su vez lo más sagrado que no ha dejado de acompañarme cada noche.
A ustedes por todas las razones. Aunque ninguna sea suficiente y verdadera.
10 de Julio - Invierno del 2018
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