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Porque a pesar de todas estas muertes sucesivas, de la idiosincrasia del agua y todo objeto celeste. Me cuestiono este cúmulo de nubes en el pecho. Este despertar en cada gesto que empareja con la muerte. Pues debido a ello puedo descansar esta turba de colores en la hierba. Porque a pesar de ser cierto, de creer en la supremacía del oro bendito de tus alucinaciones, a pesar de todo esto, puedo hundirme lentamente en el sueño de los metales más extraños que conforman la idea fabulosa de tu existencia eléctrica. A pesar de la muerte misma, que se instala en este reino donde los pájaros se estrellan a tus pies, confundidos, como yo en este instante, donde el universo se quiebra.
He pasado los días pensando que hueso sostiene el esqueleto de esta galaxia. Y no he hecho más que sentir mi corazón de terciopelo consumido por lo verdadero. Doy vuelta a mis bolsillos como si de mi piel se tratase, para encontrar las flores que recogí durante estos últimos años, una a una, hasta dar con mi alma y tenderla al sol, es una sábana blanquísima, brillando bajos los ojos de todas las constelaciones, que siguen su historia, con nuestro torso tatuado sobre sus hilos, al igual que el manto de Turín, que a pesar de ser una mentira, es la mentira que más amo, de solo mirarla, con los ojos del pequeño que era, a través del fuego.
A través de su trance inacabable, cabalgando en los márgenes del reino, entre auroras boreales por encima de la conciencia, a veces mía a veces con la de un colibrí, que contiene la fortaleza de un toro de Lidia, que lleva sangre sobre el lomo de sus días en los campos verdes.
No podría darle un nombre a este río del que todos hablan, que pesar de su transparencia que no ven, del lodazal que odian, florecen nenúfares.
El sol cae junto a la mentira que enarbolo
Al unísono de una estructura mayor que desconozco
Pero hace vibrar el futuro y este me concede un golpe en contra de lo que más temo
Y a su vez es lo más sagrado que no ha dejado de acompañarme cada noche.
A ustedes por todas las razones aunque ninguna sea suficiente y verdadera.
Invierno 2024
1 comentario:
Mareas
Motivos no faltaban para soltar el timón, dejando que el vino haga la danza, mientras tu copa marca el compás de su incesante vaivén.
Noches de marea alta, horas cortas y orillas borgoña, que acabarían con todo a su paso, atrapó el tiempo, cantó tus versos, soltó tus lazos, no supimos volver.
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