martes, 17 de enero de 2023

Basta

Entonces no sabía que me había encadenado de por vida a un noble pero implacable amo, cuando dios le entrega un don también le da un látigo y el látigo es únicamente para autoflajelarse.

domingo, 15 de enero de 2023

un dos tres un dos tres

Éramos otros, los que sin sentido íbamos de lado a lado por el mundo, intentando hacer cantar cada órgano celeste. Pienso en todas las partículas como minúsculos dioses riendo entre la caída de todos los soles.

Otra vez Lima existe ante mi sombra.

martes, 10 de enero de 2023

Diodos

Estaba convencido por aquella época, que hacía lo correcto, pero qué era lo correcto.

¿Escuchar con respeto a un imbécil? 

La sociedad ha aceitado bien sus engranajes y yo funcionaba a la perfección en ese mecanismo. 

El idiota siempre había sido yo, la educación al responder temas importantes sin la convicción necesaria, de cerrarle el hocico a tanta gente, era un pecado que estaba dispuesto a redimir a toda costa.

Perdí muchos años de no, haberle hecho tragar tierra a tanta gente, que hoy ocuparían el mejor lugar en las veredas, bajo la historia de la derrota.¿

Estoy aquí, porque tengo miedo, porque le temo a la muerte y la muerte anda rondando, todas nuestras plazas. Tengo miedo que la muerte abrace a un hermano mío, por eso estoy aquí.

No he podido dormir, a pesar de tener las puertas y ventanas de la casa, no he podido dormir en este sueño de balas cortando el viento. 

Químicos, para dormir y contener, la rabia, químicos, para no convertir la rabia en un deseo, químicos para no volver aceptar esta realidad.

No hilo, no articulo los días, las horas, los muertos, no hablo.

Amaneció nublado. 

lunes, 9 de enero de 2023

Adiós Charles Simic


LO QUE LAS GITANAS REVELARON A MI ABUELA CUANDO AÚN ERA JOVEN
La guerra, la enfermedad y el hambre te harán su nieta favorita.
Serás como el ciego que ve una película muda.
Picarás cebolla y trozos de corazón en la misma sartén caliente.
Tus hijos dormirán en una maleta atada con sogas.
Tu esposo te besará cada noche los pechos como si fueran dos lápidas.
Ya vuelan los cuervos por ti y por tu gente.
Tu hijo mayor yacerá con moscas en los labios sin sonreír ni alzar la mano.
Envidiarás a cada hormiga que conozcas en la vida y a cada maleza al lado del camino.
Tu cuerpo y tu alma se sentarán en postes separados mascando el mismo chicle.
“Bella muchacha, ¿estás a la venta?”, dirá el diablo.
El sepulturero comprará un juguete a tu nieto.
Tu mente será un nido de avispas aun en tu lecho mortuorio.
Le rezarás a Dios pero Él colgará un letrero que diga “Favor de no molestar”.
No preguntes más: es todo lo que sabemos.

**
El muerto desciende del cadalso. Lleva su cabeza
ensangrentada bajo el brazo.
Los manzanos están en flor. El muerto se dirige a
la taberna del pueblo a la vista de todo el mundo. Allí
toma asiento en un rincón y pide dos cervezas, una
para él y otra para su cabeza. Mi madre se limpia las
manos en el delantal y le sirve.
Qué tranquilo es el mundo. Uno puede oír el
viejo río, que en su confusión a veces se olvida y fluye
hacia atrás...

miércoles, 4 de enero de 2023

Matsumoto Taiyou

 [...]

Era irreemplazable el alto voltaje del peregrino en su ascenso, en la búsqueda desaforada de la raíz equivocada. Luego solo fue la fábula viva en las conversaciones nocturnas, el sueño recurrente en los niños que abrazan el olor familiar cuando son atravesados por la imagen turbia del mundo. Ahora la niebla evoca un balbuceo húmedo, quizás cercano al nombre que te emparentó con alguna entidad humana, pero el viento ha alejado todo cuerpo, toda noción maravillosa de un instante.
El primer delirio de Zé
Shiro del manga "Tekkon Kinkreet" de Matsumoto Taiyou



El primer delirio de Zé

 [...]

Una casa custodiada desde el amanecer. Mi casa. Se abre un camino sin ser primavera. No conozco el nombre del milagro, ni de las gotas que se filtran de lo alto. Hablo entonces de creaturas veloces que olfatean las visiones. Se cierra el camino y la nube sigue su rumbo. La corriente me permitió avanzar, deshojar el mundo mientras cantaba: “Miren todos sus piernas endurecidas por el dios de las alucinaciones, miren desde la cima de su ruina”
Así enloquecimos con el canto de las aves, enloquecimos bajo el aire agitado de sus alas. Es la ventura del hombre esta dentadura frágil que derriba árboles, en sus peregrinaciones absurdas al centro de las tormentas. Encendidos en la memoria volátil del cáñamo, brillamos desde el exilio deseado. Convulsionamos sin entender siquiera el orden natural del día. Mantuvimos en cautiverio el fuego preciso.
Proclamamos nuestra la tierra donde las ballenas van a morir, la espuma prodigiosa de sus bocas en la arena. El primer desgarro de carne volando lejos de la unidad pensada. Los territorios donde solo las suposiciones hacen ciertos los abismos.
Pequeños suicidas, saben la extensión del imperio de la voluntad que ha derribado toda frontera. El éxodo de la luz por la selva que ha dejado la noche con un solo órgano vital e indescifrable. La mecánica de la sombra en la cuadratura del cielo.
“La solidez de las sombras” - El primer delirio de Zé



domingo, 1 de enero de 2023

Sobre todo yo

 “Ni siquiera ha crecido la hierba. No se puede ser vagabundo y artista; y al mismo tiempo un burgués sano y cuerdo. Si quieres embriaguez, ¡acepta también la resaca! Si quieres sol y bellas fantasías, ¡acepta también la suciedad y el hastío!

Todo está dentro de ti, el oro y el barro, el deleite y la pena, la risa infantil y la angustia moral. ¡Acéptalo todo, no te aflijas por nada, no intentes rehuir nada! No eres un burgués, tampoco eres un griego, no eres armónico y dueño de ti mismo, eres un pájaro en plena tormenta. ¡Déjala rugir! ¡Déjate llevar! ¡Cuánto has mentido! ¡Cuántas miles de veces, incluso en tus libros y poesías, has fingido ser el armonioso y sabio, el feliz, el iluminado! ¡Lo mismo han fingido ser los héroes al atacar en la guerra, mientras las entrañas temblaban! ¡Dios mío, qué simiesco y fanfarrón es el hombre, sobre todo el artista, sobre todo el poeta, sobre todo yo!"
Hermann Hesse