*
-¿Oíste el concierto de la violinista Soviética?-
Realmente pensé que era libre, pensé en saltar por encima de las butacas, desnudarme y gritar como un recién nacido lleno de mundo, pensé en correr por los jardines de Versalles observándolo todo.
Hermoso y metálico como un satélite inalcanzable.
Cuando desperté, aún todo estaba cubierto por niebla, sus memorias eran páginas blancas donde donde podía quedarme.
-Yo dejé en ellos una herida que no podrán curar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario